Sinopsis:
Llega la esperada tercera parte
de Los Westfield. Una novela romántica histórica libre de estereotipos de
género! Ironía, malentendidos, sarcasmo y pasión a raudales.
Hay algo mejor que la venganza:
la justicia.
¿Y algo peor que tu enemigo? su
abogado.
Helen Westfield siempre ha sido
un poco extravagante, le resulta imposible renunciar a un reto y odia que la
hagan quedar como una idiota. Si además, quien consiga ponerla contra las
cuerdas se atreve a amenazar a su familia, la venganza es la única salida. Por
eso a nadie le sorprende que su nueva cruzada sea destruir a Derek Aldrich, un
impostor cazafortunas que tuvo la osadía de engañarla. ¡A ella!
El plan está trazado, nada puede
detener la sed de justicia de Helen. Nada, salvo, tal vez, una denuncia por
difamación y un abogado cargante, inoportuno y atractivo con una habilidad
extraordinaria para sacarla de quicio. En la carrera por conseguir las pruebas
para librarse de la condena solo habrá un vencedor, ¿o no?
Helen sabe cómo mantener el
control, pero es posible que esta vez las cosas se le hayan ido de las manos.
Opinión personal:
Siempre
cometo el error de leer las novelas demasiado espaciadas. Mi mala memoria hace
que me pierda demasiadas cosas. Justo es lo que me ha pasado aquí: no recuerdo
a Helen ni a Alex. No le hubiera dado más importancia —es algo a lo que ya
estoy muy acostumbrada— si la autora no hubiese hecho esos comentarios al final
de la publicación dejándome con la curiosidad de ese cambio de registro,
porque, aunque Helen tiene su carácter, tampoco me ha parecido tan malo como lo
describe la propia autora y, si es así, me he perdido el cambio. Mea culpa
No
viene a cuento, sé que no viene, pero Alex y Dereck son los nombres de los
protagonistas de la serie «jugadores» de Lisa Kleypas… siempre he sido fan
de Alex; así que, esta tota coincidencia me ha hecho mucha gracia.
Helen
es una mujer independiente y brava. Le cuesta bastante empatizar con los de su
alrededor y tiene un puntito egoísta que hace que actúe sin medir las
consecuencias que sus acciones pueden tener en los que le rodean. Al mismo
tiempo, me ha gustado su valentía y esa forma tan sencilla con la que acepta
derrotas y planta cara a las adversidades. Sí, la han engañado, pero antes de
esconderse y ocultarlo, no tiene ningún reparo en arriesgar su reputación para
señalar y castigar el culpable, quizás más como venganza que con el fin de evitar que lo haga con alguna otra damisela.
Creo que su orgullo tiene muchísimo que ver en sus resoluciones.
Alex ha sido, para mí, el motor de la novela y el alma del libro. También creo que su personaje y darle veracidad resulta más complicado que a Helen —últimamente se están poniendo de moda este tipo de protagonistas femeninas y han perdido parte de su originalidad— pero Alex sí creo que valga la pena ya que se aleja del típico libertino de corazón grande, ni el valeroso héroe, ni el cascarrabias o el atormentado. Alex es un hombre normal que hace lo necesario para hacerse un futuro. Un hombre sencillo, discreto, pero resolutivo y de gran mente.
La
trama me ha parecido muy original. Son pocas las novelas que se tejen alrededor
de una acusación o que un juicio sea tan relevante y la excusa para que dos
personas tomen contacto y se relacionen tanto.
Dejaré
de lado el tema de lo poco apropiado que me ha parecido todo el contexto del
viaje y pesquisas de los protagonistas. Soy consciente de que una mujer moderna
de la época se tomaría ciertas licencias, pero aquí —considero— que la autora
—que antes ha marcado tanto la buena ambientación en sus novelas (tanto en
vocabulario como en acciones) ha traspasado demasiadas líneas y se ha subido al
carro de la modernidad histórica que tanto gusta últimamente. Se puede escribir
sobre mujeres avanzadas, pero la excusa de pertenecer a una familia «rarita» no
me parece suficiente, hay que matizar. No negaré que me lo he pasado bien con
sus tejemanejes, pero creo que todo se puede conseguir con un poco más de rigor
(ese que tanto echamos de menos).
Dicho
esto, me ha gustado la investigación, me ha gustado la evolución del personaje
de Alex y cómo adquiriendo poco a poco confianza, una confianza que, al final,
tiene un momento espectacular.
No
obstante, la relación entre ellos ha tenido sus momentos. Pasa rápidamente de
sentimientos totalmente confrontados a sentimientos demasiado fuertes, no es
que no sea paulatino, es que es demasiado brusco. Sin tener en cuenta lo fácil
que resulta todo al final, con esa gran diferencia de clase social, que tanto
se remarca durante la novela, dejada totalmente de lado. Un final apresurado
que marca un desequilibrio entre la primera mitad y la segunda.
Quizás
por eso me resulta complicado comentar esta novela. Me hayo dividida entre el
disfrute, la credibilidad y cambio de registro de la autora. Por una parte, me
lo he pasado muy bien con las aventuras y las pesquisas de la pareja, pero, por
otra, creo que Helen, como personaje, no consigue estar a la altura de Alex y,
no puedo negar, que estaba mucho más interesada en cómo iba a salir del lío del
juicio que de la pareja en sí ya que ese viaje de investigación resulta un poco
increíble para la época.
«Si
no te conociera» ha sido una lectura entretenida, con una temática muy
interesante en la que me hubiera gustado que la autora profundizara más. Para
mí, la ha desaprovechado, me resulta algo inverosímil el gran viaje que hacen
los protagonistas, no tan solo por la diferencia social, sino por la enemistad
que les une desde un principio. No obstante, el tema del juicio sí que me ha
resultado de gran interés.
Si al error de espaciar demasiado las lecturas de una misma serie le añades además mi cada vez peor mala memoria, imagina el resultado... Yo solo he leído el primer libro de esta serie y me gustó mucho, pero antes de este, quiero leer el segundo, así que aún falta bastante para que pueda dar mi opinión sobre esta lectura. Sin embargo, coincido contigo en que en libros de corte histórico, el tema de tomarse muchas licencias debería analizarse, a mi, por lo menos, me sacan de la historia y son capaces de arruinarme la lectura.
ResponderEliminarBesos!
¡Hola!
ResponderEliminarMe apunto al carro de las que leemos espaciado y tenemos mala memoria jajaja. Me suele pasar. La novela no pinta mal y le has dado buena puntuación. Lo que no sé si me gustaría encontrarme las moderneces, no lo llevo bien con eso. Un besote!!!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarUf, no puedo con las novelas históricas con personajes inverosímiles porque son demasiado modernos...
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