Sinopsis:
Devney Perry, autora superventas
según USA Today y reina de los romances de montaña, llega a nuestro país con un
enemies to lovers ambientado en un pueblo pequeño que hará las delicias
de los fans de Gilmore Girls y de los cowboys. Winslow Covington cree en tres
en la vida, en la libertad y en la ley. Como la nueva jefa de policía de
Quincy, en Montana, sabe que debe demostrarle al pueblo lo que vale, y eso
significa que tiene que congraciarse con los Eden..., cosa que sería pan comido
de no ser por su rollo de una noche con el hijo mayor de la familia, Griffin.
Acostarse con él fue un error monumental. Y, aunque Winslow está decidida a
evitarlo a toda cosa, cuando aparece un cadáver en la propiedad de uno de los
Eden, Griffin y ella no tienen más remedio que volver a verse. Todas las pistas
del crimen apuntan hacia uno de los habitantes de Quincy, y poco a poco Griffin
empieza a descubrir que Winslow, que hasta el momento ha sido solo la horma de
su zapato, es en realidad una mujer preciosa, inteligente... e irresistible.
Pero no solo para él. También para el asesino.
Opinión personal:
Pues la sinopsis me parece un poco engañosa porque —no voy a decir el qué— no es tal como se explica.
Este es un claro ejemplo de
novela de suspense descafeinada que no me ha gustado. Aunque he de decir que si
sois amantes de las sagas familiares que transcurren en algún pueblecito de la
américa profunda, seguro que será una delicia leerlo. Justo eso me ha sobrado, mucho, tanta familia, tanta que hace que el misterio pase a un tercer plano. Me
han sobrado cenas, comidas, meriendas y tanta visita familiar que no aporta
nada a la historia más que agradar a las muchas lectoras que disfrutan de eso,
que no es mi caso.
Winslow, jefa de policía, con un
carácter independiente y decidido. Pero al que no he terminado de ver qué
aportan esas pesadillas. No sé ni qué explicar de ella. Me ha parecido un
personaje bastante plano.
Griffin va de independiente, muy
familiar e iba muy bien hasta que le ha salido la vena de macho alfa protector.
Tampoco tengo mucho más que explicar.
La construcción de personajes no
es el fuerte de la novela… no sé si es porque es una primera entrega de saga y
hay demasiado individuo con el que lidiar.
El misterio y la investigación brillan por su ausencia hasta la última parte de la novela. El resto es la presentación de la protagonista como nueva jefa de policía, la interacción con sus subordinados y otros y lo que pueda acontecer a cualquier persona que llega a un nuevo trabajo. Pero investigar, investigar, se investiga bien poco hasta que al final… por esas casualidades de la vida, se destapa el pastel. No voy a decir que esa escena final no esté bien porque te hace rememorar una pista que se sabía importante —si no, no viene a cuento.
Pero, al igual que la editorial hace bondades y comparaciones, he de decir que si has leído a algunas de las grandes del suspense romántico… este resulta muuuuy flojo.
Entre Winslow y Griffin hay pura
química, eso no se puede negar, y toda su relación se construye en base a las
muchas escenas de sexo, que nunca se repetirá (dicho cada vez por ellos), pero que pasa cada capítulo. Y
entre escena y escena, al final se dan cuenta de que lo que tiene es un amor
incondicional. Vamos, que no me ha terminado de convencer la forma en la que la
autora desarrolla la historia. Sin poder olvidar ese regustillo algo machista
que encuentro en algunas novelas contemporáneas americanas. Ese sentimiento
protector/posesivo que tanto me molesta porque no me parece convincente que una
mujer que a los treinta años ya es jefa de policía, necesite un señor que la
proteja.
«Las princesas también somos
capaces de matar dragones»(frase que no es mía pero me encanta). Quizás por eso ese final no me ha gustado.
No sé si esperaba más suspense,
más investigación, menos sexo y más conversación entre ambos… pero, en general,
iba avanzando la novela y todo lo que me estaba explicando la autora no me
interesaba.
Seguro que la culpa la tiene esa
narración en primera persona que se va alternando entre los pensamientos del
vaquero con gorra de béisbol y la jefa de policía. Técnica que me puede parecer
interesante cuando sirve para que conozcas los sentimientos de un personaje,
pero no para que narres algo que simplemente ocurre…. y totalmente ineficiente en
una novela de supuesto suspense a no ser que le des voz al asesino.
Estoy empezando a cogerle mucha
manía a tanta primera persona… y no entiendo por qué se está poniendo tan de
moda.
En definitiva, «Cumbre Índigo» no
me ha convencido. Como novela de suspense policiaco deja mucho que desear y
como novela contemporánea romántica, la pareja tiene un aire al que le tengo
mucha manía, además, su relación no tiene nada de especial. Hay momentos que me
han parecido bastante aburridos. Así que, es muy posible que sea un «no eres
tú, soy yo».
Si os gusta el suspense romántico, Sandra Brown es una mucho mejor opción; si gustáis de novelas de acción, otra muy buena es Pamela Clare.
Datos de interés: Ficha de la novela - Ficha de la autora- Web de la autora
Pepa
Me he ido desinflando con cada nueva línea que leía en tu entrada porque sí, soy fan de las sagas familiares que transcurren en algún pueblecito de la américa profunda, jajaja, pero ya veo que esta no sería una buena opción para mi y prefiero evitarme el fiasco. Flipo con lo de la sinopsis, aunque obviamente, al no haber leído esta historia, desconozco qué no es cierto...pero lo peor es que no haya apenas investigación, en una novela de estas características. Sobre la historia de amor, más de lo mismo: me da mucha flojera las historias donde los protagonistas dicen una cosa y luego actúan de otra (lo digo por las escenas de sexo que comentas) y la guinda es que ella necesite un protector... que en otros casos me encanta, pero siendo ella jefa de la policía, como que la deja en mal lugar, todo sea dicho de paso. Creo que me sigo quedando con Pamela Clare y ojalá pronto pueda leer algo de Sandra Brown ¿ te puedes creer que no tengo ningún libro suyo?
ResponderEliminarBesos!
Hola :)
ResponderEliminarVaya, ya siento que no te gustara. A mí me encantó y me entretuvo bastante y eso que no soy muy fan del suspense, pero tengo ganas de leer los siguientes.
Besos
Hola!
ResponderEliminarEché un vistazo a la novela y no me dió buena vibra. Leyendo tu opinión me aclaras lo que yo ya sospechaba......Para mí, en suspense romántico ese estilo narrativo es un no rotundo e intuyo mucho relleno que no viene a cuento. Pero si sobre todo la intriga flojea.... Pues mejor me inclino por releer a las autoras que has citado.
Un 😘
hola
ResponderEliminarno me llama nada de nada esta novela, y después de ver tu opinión y ser una saga lo tengo clarísimo, lo dejo pasar
Gracias por la reseña
besotessssssssssss
¡Hola!
ResponderEliminarA mí me gustó la novela, quizás como tú dices el que ha leído muchas novelas de este estilo esta le parezca mala. Me apunto tus recomendaciones, de Pamela Clare he leído algo, así que voy a ver si encuentro alguna novela de Sandra Brown. Un besote!!!
Pues por tus comentarios, hubiera dicho que te había gustado incluso menos. Qué mal lo de que la sinopsis sea un engaño. En cuanto al uso de la primera persona, a mí me gusta, pero me parece una tontería si la narración es objetiva.
ResponderEliminar